Cuatro cosas que aprendí luego de tomar una foto cada día por un mes

Estas son algunas cosas que aprendí durante mi proyecto del 2015, “Julio en Blanco y Negro.”

1. A falta de grano de rollo, bueno es el ruido
La mayoría de las fotos que he tomado han sido con ISOs altos, particularmente 1,600 y 3,200 (en una Canon EOS Rebel T1i). El ruido digital es agradable en blanco y negro, le da una textura interesante a las fotos, muy similar al grano en la fotografía con rollo. Muchos fotógrafos que usan Tri-X (un rollo de Kodak blanco y negro) hacen push o pull a propósito para aumentar el contraste y tener más grano.
El mismo ruido es desagradable en las fotos a colores, pero en blanco y negro es, en mi opinión, excelente. Por ejemplo, esta foto sin ruido tiene un acabado muy estéril y “clínico” para mi gusto. Es como una pintura hecha con medios digitales y otra con medios tradicionales. El primero se ve muy perfecto y frío, hay que agregarle a propósito imperfecciones y ruido para darle un toque más “natural” que el medio tradicional consigue sin esfuerzo.
Esta foto es un ejemplo de ruido agradable, observen las áreas desenfocadas.

2. Todos juntos es mejor
Algo completamente inesperado para mí fue la reacción de varios amigos en Facebook que les gustó la idea de mi proyecto y quisieron hacer lo mismo. Mi esposa también participó y ayudarla en ocasiones a tomar su foto fue de mucho ánimo. La fotografía es una actividad mayormente solitaria, pero esta vez fue una experiencia comunitaria y mucho mejor de lo que tenía planeado. ¡Gracias a todos!

3. El detalle del detalle
Viendo las fotos de los demás que también tomaron fotos me di cuenta de que mi estilo se centra en los detalles, mis sujetos son fotografiados de cerca, muy pocas veces de ángulos anchos o espacios abiertos. Esto debe ser obvio para los demás, pero no lo era para mí. Me gusta la profundidad de campo reducida, el bokeh, el observar algo de cerca, en intimidad. Gran parte es también el hecho de que mi lente favorito es el 50mm f/1.8. Mi 18-55mm (sí, el lente kit) se rompió y prácticamente funciona como un prime de 18mm, y por más que cierro la apertura, el detalle al infinito es terrible, aún en abundante luz. Quizás si no tuviese todos esos problemas me animaría a tomar más fotos anchas y sin el resultado fácil (¿barato?) de la reducida profundidad de campo. Es mi siguiente paso para crecer como fotógrafo.

4. Actualizamos asíncronamente
Algo que funcionó bastante bien para mí era que, si bien tomaba una foto cada día, no siempre publicaba una foto cada día. Con lo ocupado que estaba a veces era imposible procesar la foto y subirla al blog y Facebook, así que lo hacía un par de días después. Nunca había considerado que son dos cosas muy distintas y que podría desacoplarlas.

En estos últimos meses he dejado un poco de lado la fotografía, pero voy a retomarlo por la razón especial de no perder el progreso del crecimiento de mi hija.